Es el efecto de Isla Urbana de Calor
Lo que dice la ciencia...
Al comparar los registros de temperatura, el GISS de la NASA trata por todos los medios de eliminar cualquier posible influencia del Efecto Isla Urbana de Calor. Comparan las tendencias urbanas de largo plazo con las de las áreas rurales más próximas y ajustan la tendencia de modo que siga la tendencia rural. Este proceso está descrito con detalle en la página web de la NASA (Hansen 2001).
Los científicos de la NASA encontraron que en la mayoría de los casos el calentamiento urbano era pequeño y se situaba dentro de los márgenes de incertidumbre. Sorprendentemente, el 42% de las tendencias urbanas eran más frías que sus vecinas rurales, debido a que las estaciones meteorológicas suelen estar ubicadas en islas de frío (p.ej. en parques o zonas verdes dentro de la ciudad). en todo caso, lo relevante es que somos consicentes del efecto de calor urbano y se ajusta rigurosamente en el análisis de los registros de temperatura.
Esto confirma un estudio peer reviewed del NCDC (Peterson 2003) que realizó un análisis estadístico de las anomalías de temperatura urbanas y rurales y concluyó que "contrariamente a la creencia generalmente aceptada, no se encuentra ningún impacto estadísticamente significativo de la urbanización en las temperaturas anuales... Los sectores industriales de las ciudades pueden ser significativamente más cálidos que las zonas rurales, pero las observaciones meteorológicas suelen hacerse dentro de islas frías, como los parques, más que en regiones industriales."
Otro estudio más reciente (Parker 2006) comparó los registros de temperatura de las noches en calma de los últimos 50 años, con otro de noches con viento. El estudio concluyó que "las temperaturas han aumentado igual en noches ventosas que en noches en calma, indicando que la tendencia de calentamiento no es una consecuencia del desarrollo urbanístico".
Comparando tendencias urbanas y rurales
El estudio Urbanization effects in large-scale temperature records, with an emphasis on China (Jones et al 2008) encuentra que las tendencias de temperatura urbanas muestran pocas diferencias con las rurales. El documento comienza comparando 5 lugares dentro y alrededor de Londres. La Figura 1 muestra las temperaturas absolutas, indicando claramente una influencia del efecto urbano de calor en el London Weather Centre (en color marrón) y en St. James Park (azul oscuro). El registro más frío es uno rural ubicado en Rothamsted (verde oscuro). Sin embargo, el exceso de calor urbano no tiene ningún efecto en la tendencia de calentamiento: todos los lugares muestran la misma tendencia global de calentamiento.
Figura 1: tendencias de temperatura anual de cinco lugares dentro y alrededor de Londres. Las líneas marrón y azul oscura son ubicaciones urbanas, mientras que las verdes son rurales.
Se hizo una comparación similar entre dos ubicaciones en Viena. De nuevo, la temperatura absoluta es mayor en la ubicación urbana, pero ambos sitios muestran tendencias prácticamente idénticas.
Figura 2: tendencias de temperatura anual de dos ubicaciones en Viena: Hohewarte en el centro (en marrón) y la ubicación rural de Grossenzersdorf (en verde).
Comparando redes rurales y urbanas en China
Una vez visto que las áreas urbanas muestran las mismas tendencias que las áreas rurales circundantes, ¿qué sucede con las áreas urbanas que están aún en desarrollo? En contraposición a Europa, China ha experimentado un fuerte crecimiento económico durante los últimos 30 años, con un crecimiento espectacular de sus áreas urbanas. Si existe un calentamiento significativo relacionado con el urbanismo, sin duda debería manifestarse en esta región y durante las últimas décadas. La Figura 3 compara diferentes registros de temperatura:
Figura 3: anomalías de temperatura anual. Jones et al (líneas punteadas de color verde y marrón) representa un set de datos de 42 estaciones rurales y 42 urbanas. Li et al (líneas sólidas verde y marrón) representa un set de datos homogeneizado de 42 ubicaciones rurales y 40 urbanas. Li (en color azul) es un set no homogeneizado de 728 estaciones, urbanas y rurales. CRUTEM3v (en rojo) es un set de datos sólo sobre tierra firme (Brohan et al., 2006). Este gráfico utiliza como base (anomalía = 0) el promedio del periodo 1954–83.
El hecho de que prácticamente no haya ninguna diferencia entre las seis series de datos nos dice varias cosas. Sets de datos pequeños de 40 estaciones muestran el mismo resultado que el set de 728 estaciones. En otras palabras, para una región de este tamaño, la media puede construirse a partir de un número limitado de ubicaciones, implicando que en el set de 728 estaciones hay bastante redundancia.
A medida que aumenta la escala regional, el impacto global de los ajustes de homogeneización disminuye. Esto puede resultar algo desalentador para aquellos cerebritos currantes que se pasan cientos de horas depurando meticulosamente los datos de las estaciones meteorológicas para asegurar que todos los datos sean homogéneos, pero, por supuesto, ellos no lo hacen con la finalidad de obtener tendencias globales.
Y, por supuesto, el resultado más significativo: la tendencia es la misma tanto para grupos urbanos como rurales sobre cualquiera de los periodos. Incluso en el caso de áreas urbanas en desarrollo, cuando se promedia sobre una gran superficie, la isla urbana de calor tiene poco impacto en la tendencia de calentamiento.
Translation by Jesús Rosino, . View original English version.
El argumento escéptico...